SUGAR LANE

catwalk

Cibeles Madrid Fashion Week

By Sugar Lane - Wednesday, February 23, 2011

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Party sin humos

By Sugar Lane - Tuesday, February 22, 2011

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burgundy

Puesta de Largo de María

By Sugar Lane - Friday, February 18, 2011

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Magdalenas y Muffins

By Sugar Lane - Sunday, February 13, 2011

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Películas y trailers

By Sugar Lane - Friday, February 11, 2011

Qué pasa con el cine en España? En serio, para mi ir al cine se está convirtiendo en una experiencia algo traumática.

Para empezar, yo no tengo tiempo. Y si alguna vez lo tengo, estoy tan cansada que lo único que quiero es tirarme en el sofá con un té bien caliente, porque hay que ver qué frío hace en este país. Pero bueno, hay que salir, por aquello de “que te dé el aire fresco” aunque no sé yo qué aire es mejor, si el de la sala o el de las calles de Madrid… pero esa es otra historia.

Ya he tomado la decisión, voy al cine. Y ahí empieza el siguiente problema: qué veo? Pues seguramente todas las que anunciaron la última vez que estuve con un “Próximamente” ya ni estarán en cartelera. La cartelera, según mi criterio se divide en 4 categorías: Infantiles, Hollywood, España y Toronto. Las infantiles quedan descartadas porque ya no tengo edad, las de Hollywood quedan descartadas porque el cine doblado me da mucha pereza, las de Toronto son todos aquellos dramas (preferiblemente incluyendo abortos, problemas con la bebida, abusos y muchos silencios largos) que podrían ser nominados en algún festival de cine (dejando al margen los Oscars y Cannes), y tal y como está el patio yo no voy a sentarme en una butaca a ver un drama, por eso de que los diseñadores somos unos frívolos.

Así que nos quedan las españolas, subdivididas en tres grandes grupos: En el numero uno estás aquellas que en el estreno en Gran Vía congregan desde las 3 de la tarde a fans adolescentes de Física o Química, con pancartas y “I love U” s en la frente que gritan hasta desmayarse cuando aparece Maxi Iglesias 7 horas después. En el número dos están las promocionadas por “Pechito-cómo-estamos” (A.K.A. Bisbal) bailando entre rejas con tías buenas semidesnudas untadas de aceite. Después estarían las españolas de Toronto, y por último las buenas, que son las que te hacen pasar un buen rato y te recuerdan que es bueno salir a que te dé el aire. Lo de fresco vamos a dejarlo.

Ahora solo falta que de las 24 salas haya alguna donde pongan “Primos” o similar. Y que te venga bien la hora. Pero no, no tienes suerte, así que me decido por “The Tourist” pensando “bueno, vale, la han doblado, pero ver a Brad Pitt y Johny Depp en pantalla gigante igual lo compensa… y además vinieron a Madrid a promocionarla, y se fueron de museos…”

Y ahora llega la de coger el coche, hay que ver que mal se conduce en este país, y las motos! Por el amor de Ganesh! Aquí las motos se creen que ocupan igual que un coche, y se ponen detrás de ellos, con la calma, en vez de ir zigzagueando y adelantando… yo es que me había acostumbrado al estilo kamikaze y no puedo entender que haya más atasco en la A-6 que en Bandra. Por fin llegas al cine, rezas para que queden asientos más allá de la fila 5, y sacas tu Carnet Joven, que de poco sirve porque el palo te lo llevas igual: 6’50 €! Que no son nada si los comparas con los 8€ que costarían la Coca-Cola sin gas y las palomitas recalentada, en caso de estar dispuesta a pagarlos, y aún tienes que dar gracias porque la película no es en 3D. Y aunque te quieres enfadar, y quemar el puesto de palomitas, piensas, “bueno, estoy pagando por pasar un buen rato viendo Brad Pitt, y dado que en los últimos 6 meses solo me he relacionado con mujeres y gays, va a merecer la pena”.

Me siento en la butaca, y sorpresa! No se reclina. Porque aunque he pagado 10 veces más que por una entrada en Mumbai, la sala es la cuarta parte, la butacas no se reclinan, y la película va a durar la tercera parte, pero si le sumo el tiempo de atasco igual llega a las 4 horas. Y en el minuto 108 me doy cuenta de que Brad Pitt no va a salir en la película, que sí, vino a promocionarla, pero porque acompañaba a su mujer, la cual sale en la película impecablemente vestida y, a decir verdad, más guapa que Pitt y Depp juntos.

Así que yo, a partir de ahora, he decidido que voy a ver únicamente producciones bollywoodienses de 4 horas (cuando tenga tiempo), porque son música, colores y lentejuelas, que es lo que se necesita en épocas de crisis, y del resto de industrias cinematográficas voy a ver los trailers, que a fin de cuentas te resumen la película, muestran los mejores momentos y no te decepcionan al final porque aunque esté muy claro cómo acabará la película, en mi cabeza acaba como digo yo, que en este caso es en una góndola con Brad Pitt.